En una de las noches más emocionantes del torneo, Juárez y Puebla regalaron un auténtico espectáculo de goles y emociones en el Estadio Olímpico Benito Juárez. El empate 4-4, correspondiente a la jornada 15 del Torneo Apertura 2025 de la Liga MX, quedará en la memoria de los aficionados como uno de los partidos más intensos del certamen.
El encuentro comenzó con un ritmo vertiginoso. Los Bravos aprovecharon su localía y se adelantaron temprano con un tanto del brasileño Madson De Souza Silva, quien aprovechó un rebote dentro del área para abrir el marcador. Poco después, el colombiano Óscar Estupiñán amplió la ventaja con una gran definición que puso a vibrar a la afición fronteriza.
Puebla reaccionó de inmediato y mostró su capacidad ofensiva. El experimentado delantero Luis Gabriel Rey Mejía descontó con un remate preciso, y minutos después el uruguayo Emiliano Gómez Dutra empató el partido tras una gran jugada colectiva. El primer tiempo terminó con un emocionante 2-2 que reflejó la intensidad y el ida y vuelta del duelo.
En el complemento, Juárez volvió a tomar la delantera gracias a un potente disparo de media distancia de Guilherme Castilho Carvalho, pero Puebla no bajó los brazos. Luis Gabriel Rey apareció nuevamente para firmar su doblete y devolver la igualdad. Más tarde, el chileno Ángelo Araos sorprendió con un golazo desde fuera del área que le dio la ventaja momentánea a los visitantes.
Cuando todo parecía decidido, los Bravos encontraron el empate agónico gracias a un cabezazo del defensor colombiano Jesús David Murillo Largacha, que decretó el 4-4 final y desató la euforia en las gradas.
Con este resultado, Juárez se mantiene en la pelea por un lugar en la fase final, aunque deberá ajustar su defensa si quiere aspirar a más. Puebla, por su parte, rescata un punto valioso como visitante, pero deja escapar la oportunidad de escalar posiciones en la tabla general.
El duelo entre Juárez y Puebla fue un recordatorio de por qué la Liga MX sigue siendo una de las competiciones más impredecibles y emocionantes del continente: ocho goles, figuras encendidas y una noche que quedará grabada en la historia reciente del fútbol mexicano.